martes, 13 de octubre de 2009
Origen y formación de Cataluña (1ª parte).
LA MARCA HISPÁNICA
La fecha fundacional de la Marca Hispánica data de 795, aunque esa expresión no aparece documentada hasta 821. Previamente se formó el Reino de Aquitania, al frente del cual Carlomagno puso a su hijo y sucesor Ludovico Pío. El Reino de Aquitania fue encargado de establecer la Marca Hispánica.
Tras la recuperación de Gerona (785) siguió la conquista de las zonas de Ausona, Cardona, Casserras (798), Alto Segre, Urgel, Pallars y Ribagorza. En 801 fue sitiada Barcelona, que se rindió un año más tarde. Las campañas posterióres de Ludovico Pío contra Tortosa, Tarragona y Huesca, realizadas entre el 806 y el 811, fracasan.
La reconquista franca quedó paralizada y por Marca Hispánica se entiende exclusivamente a la zona catalana con límites en el Llobregat, Solsona, Cardona (o zonas montañosas cercanas), ampliada paulatinamente hacia el Segre y el Noguera Ribagorzana por un lado, y el Noya por otro.
La zona atrae a muchos cristianos que huyen de la represión de Abd Al-Rahman.
Los territorios conquistados fueron divididos en condados, al frente de los cuales el rey de Aquitania puso hombres de confianza o delegados, Condes, cargo que no era vitalicio ni hereditario. Normalmente los condes de la Marca no eran francos, sino visigodos o galo-romanos; estos personajes solían proceder de Aquitania, y, más concretamente, del Condado de Tolosa y de la Septimania cuya población no era franca sino galo-romana o, incluso, visigoda en parte. Según el Marqués de Lozoya (Historia de España, Ed. Salvat) parece que la mayoría de los condes de la Marca Hispánica “pertenecían a famosas familias de “godos renegados” que habían aceptado el dominio franco de la Galia”. Por ejemplo, el primer conde de Barcelona, Bera, era visigodo. En 817 el conde Bera fue nombrado “Marchio” (marqués) de la Marca, con lo que el Condado de Barcelona empezó a adquirir cierta importancia sobre los demás.
La base étnica de la población de la Marca Hispánica hizo honor a su nombre y fue abundantemente hispánica desde su origen. Apenas existió presencia franca, salvo la imprescindible para garantizar el control político.
Los condados en que se dividió la Marca Hispánica fueron los de Rosellón, Gerona, Ampurias, Besalú, Ausona, Urgel, Cerdaña, Barcelona y Pallars.
En toda esta área territorial los árabes dominaron un máximo de ochenta años; en algunas de estas zonas, como la alta montaña pirenaica, parece que la presencia musulmana fue prácticamente nula; parece que la sede episcopal de Urgel no sufrió interrupción alguna.
Durante su primer siglo de existencia la Marca Hispánica se va organizando según moldes romano-visigodos-francos. No todo, ni mucho menos, fueron moldes francos. Ya Carlomagno había creado un régimen especial para la Septimania y la Marca Hispánica, llamado “Régimen Hispano”. Carlomagno respetó la legislación propia de la Septimania y de la Marca Hispánica, fundada en el “Forum Judicum” visigodo, basado a su vez en el derecho romano y en las costumbres.
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2 comentarios:
excelente, como siempre. Saludos!!
Gracias Abel ;)
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